¿Y si mi bebé no quiere comer?
Uno de los mayores miedos cuando empezamos con la alimentación complementaria es ese momento en el que pensamos:
“¿Por qué mi bebé no quiere comer?”
Y la verdad es que es una pregunta muy común. Si estás en este punto, lo primero que quiero decirte es: tranquila, no estás sola.
Tanto si haces Baby Led Weaning (BLW) como si estás con triturados, puede pasar que el bebé rechace alimentos o simplemente no muestre interés. Y aunque a veces parece que “todos los bebés comen de todo” en redes sociales… la realidad es otra.
1. 🍶 Hasta el año, su alimento principal sigue siendo la leche
Una de las claves más importantes que muchas familias desconocen es que durante los primeros 12 meses, la leche (materna o de fórmula) sigue siendo su alimento principal.
El objetivo de la alimentación complementaria no es sustituir la leche, sino acompañar, explorar, aprender. Así que si tu bebé no está comiendo “mucho”, es completamente normal.
2. 👶 Cada bebé tiene su ritmo
Comparar a tu bebé con el del vecino o con lo que ves en Instagram puede ser muy frustrante. Hay bebés que desde el primer día muestran interés por la comida, y otros que necesitan semanas o incluso meses para ir aceptando alimentos.
Lo importante es ofrecer sin presionar, respetando su ritmo y confiando en el proceso.
3. 🧠 Comer también es aprender (¡y eso cansa!)
Comer no es solo tragar. Para tu bebé, comer es una experiencia multisensorial: ver, tocar, oler, experimentar texturas, coordinar manos y boca… Y eso requiere energía y práctica.
Al principio, es probable que prefiera jugar con la comida, tirarla al suelo, o solo lamerla. Y sí, eso también es parte del aprendizaje.
4. ⏰ Aprovecha los momentos de calma
Si tu bebé está cansado, con sueño o acaba de pasar por una rabieta, probablemente no tenga interés en comer. Busca momentos tranquilos, sin pantallas ni distracciones, y recuerda que la presión o la prisa son enemigas del apetito.
5. 🧩 Rechazo no es lo mismo que problema
Muchas veces confundimos “mi bebé no quiere comer” con que hay algo mal. Pero el rechazo puede deberse a mil cosas: una textura nueva, estar saliendo un diente, una bajada de apetito puntual o simplemente que ese día no le apetece.
El problema aparece si este rechazo es constante durante semanas, hay pérdida de peso o signos de alarma. En ese caso, sí conviene consultar con un profesional.
6. ❌ Evita distracciones y presiones
Intentar que el bebé coma con la tele puesta, con juguetes en la trona o con juegos para “engañarle” puede parecer útil… pero a largo plazo dificulta que aprenda a autorregularse y que escuche sus señales de hambre y saciedad.
El momento de comer debe ser tranquilo, sin premios ni castigos, y sin obligar.
7. 💬 Pide acompañamiento si lo necesitas
Si llevas tiempo con dudas, inseguridad o simplemente no sabes si lo estás haciendo bien, una asesoría de BLW o alimentación complementaria puede darte tranquilidad.
No es una señal de debilidad pedir ayuda. Es un acto de amor hacia ti y hacia tu bebé.
👉 En resumen: no te agobies si tu bebé no quiere comer
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La leche sigue siendo lo principal.
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Cada bebé es único.
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Comer es una habilidad que se aprende.
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Hay muchas razones normales por las que un bebé no come.
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No estás sola: muchas mamás pasan por lo mismo.
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