Mi experiencia con la pérdida gestacional: hablarlo también es maternidad real
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La maternidad está llena de momentos de ilusión, pero también puede traer consigo experiencias dolorosas que casi nunca se cuentan. Una de ellas es la pérdida gestacional. Hoy quiero compartir mi experiencia, no porque sea fácil, sino porque creo que es necesario hablar de ello.
💛 Si has pasado por una pérdida, este texto puede remover emociones. Léelo con calma y recuerda: no estás sola.
Cuando recibí la noticia de que mi embarazo no seguiría adelante me invadieron la tristeza, la rabia y también una culpa injustificada, aunque sabía racionalmente que no había hecho nada mal.
Me costaba incluso ponerle palabras. Hablarlo en voz alta dolía, así que durante un tiempo me lo guardé. Veía cómo otras mamás seguían con sus embarazos y yo sentía que me había quedado fuera de ese sueño.
En España todavía se habla muy poco del duelo perinatal. Es un tipo de duelo invisible, porque a veces incluso el entorno no sabe cómo reaccionar. Escuchaba frases como:
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“Eres joven, ya tendrás otro bebé”.
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“Mejor ahora que más adelante”.
Y aunque seguramente se decían con buena intención, duelen muchísimo. Lo que yo necesitaba era que alguien simplemente me dijera: “Lo siento, estoy aquí para ti”.
Cada mujer vive este proceso de forma distinta. No hay un tiempo correcto para “superarlo”. Es un camino lleno de altibajos, y es importante recordar que la pérdida también forma parte de la maternidad real.
Poco a poco fui encontrando apoyos que me ayudaron:
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Mi pareja y mi familia cercana, que me acompañaron incluso en silencio.
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Hablar con otras mujeres que habían pasado por lo mismo, porque solo ellas entendían de verdad cómo me sentía.
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Darme permiso para llorar, escribir lo que sentía y no obligarme a estar bien de inmediato.
También descubrí que buscar información fiable y escuchar a profesionales me dio herramientas para comprender lo que había pasado y dejar de culparme.

Mirando atrás, me doy cuenta de que necesitaba escuchar cosas muy simples:
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“No es tu culpa”.
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“Tu dolor es válido”.
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“Puedes llorar todo lo que necesites”.
Ojalá hubiera más conciencia sobre cómo acompañar a una mamá en duelo gestacional. No se trata de dar soluciones ni de minimizar el dolor, sino de estar presentes, de escuchar sin juzgar.
Si estás leyendo esto porque tú también has pasado por una pérdida gestacional, quiero que sepas que no estás sola. Lo que sientes es normal y no tienes por qué compararte con nadie. Cada mujer vive este duelo a su manera y con sus propios tiempos.
Hablar de ello me ayudó, y quizá a ti también pueda hacerlo. No hay maternidad perfecta: la maternidad real incluye momentos de luz, pero también sombras, y eso no te hace menos madre.
Escribir este artículo no ha sido fácil, pero creo que es necesario. Ojalá en España podamos hablar cada vez más de la pérdida gestacional y el duelo perinatal, para que ninguna mujer sienta que tiene que atravesarlo en silencio.
En Mamá Conecta encontrarás siempre un espacio de maternidad real, donde compartir dudas, miedos y también experiencias difíciles como esta. Porque todas las partes de la maternidad merecen ser contadas.